lunes, 27 de mayo de 2013

Vos me venís con cada historia…! (XI)


Las heroínas de La Coronilla
Casi todos sabemos de Juana Azurduy –luchadora de Sucre- gracias a la Negra Mercedes Sosa, pero lo real es que las historias, hazañas y pesares de los pueblos del Alto Perú, la actual Bolivia (con la cual éramos uno en aquel entonces) durante las luchas por la Independencia han sido dejadas de lado por nuestros historiadores o mas exactamente por nuestra historia escolar.
Hoy se cumple un nuevo aniversario de una heroica acción protagonizada por las mujeres de Cochabamba el 27 de Mayo de 1811.
Mitre según parece trató sucintamente el hecho y mas recientemente lo hizo nuestro historiador revisionista Cajetilla Pacho O' Donnell .
Según parece el único relato contemporáneo de lo sucedido provino de un soldado del ejército de Belgrano, Francisco Turpin, que participó de las acciones y elevó un informe a Belgrano, quien no sólo lo transmitió a la Junta sino que ordenó que todas las noches al pasar lista se rindiera homenaje a esas aguerridas mujeres y expresó en el informe citado “Gloria a las Cochabambinas que se han demostrado con un entusiasmo tan digno de que pase a la memoria de las generaciones venideras. Ellas han dado un ejemplo que debe excitar, señor excelentísimo, los sentimientos más apagados por la patria...".
El 26 de mayo las tropas realistas al mando de Goyeneche arribaron a Cochabamba días después de haber derrotado a tropas locales, lo que originó la huída del gobernador y la inexistencia de tropas capaces de enfrentarlas.
Un grupo de mujeres y algunos hombres abrió los depósitos del cuartel, se apoderó de fusiles, culebrinas y un cañón y se atrincheró en la Colina de San Sebastián o de La Coronilla desde donde ofreció resistencia a las tropas invasoras a su ingreso a la ciudad la tarde del día 27 de Mayo.
Después de tres horas los Godos rompieron el cerco, apresaron a las y los combatientes y según parece fusilaron de inmediato a una 30 mujeres y unos nueve hombres, para dedicarse luego según dicen al pillaje y a matar a mansalva a habitantes mayores y niños (y yo lo creo porque lo hacen usualmente los ejércitos buenos, los malos, los regulares, los antiguos, los modernos, los patriotas y los traidores)
Y como suele pasar con la historia los hechos permanecen rodeados de dudas. Menos dudas de las que hay respecto a la existencia de Jesús (de la que no hay una sola evidencia contemporánea siendo Flavio Josefo el primero en mencionarlo como 50 años después), pero dudas al fin.
Y si prácticamente todo el mundo cree que Jesús existió ¿Por qué dudar entonces de la veracidad de esa gesta heroica, que así lo fue, detalle más o detalle menos?
Así que no se sabe si fueron todas las Cochabambinas, o muchas, o pocas, si fueron las de cierto abolengo o las pobres, o de ambas clases (yo me juego por las pobres, las de abolengo seguramente apelaron al conocido “animémonos y vayan”), si fusilaron los gallegos a 30 ó a 300.
No importan los detalles demasiado. La gloria de esa acción empequeñece cualquier duda.
Gloria a las Cochabambinas de La Coronilla

Y a ver si se lo enseñan a los pendejuelos, será justicia

PD: La foto corresponde al monumento a las heroínas en Cochabamba, Bolivia.

viernes, 17 de mayo de 2013

Me salió un versito



Ya publiqué esto alguna vez, algo que escribí cuando Viola, otro genocida, murió.
Hoy murió otro, quizás no el principal pero sí emblemático.

No se merece ni un verso nuevo.

Están naciendo ahora

Están naciendo ahora, yo sé que están naciendo
los que con furia ingenua trastornarán el mundo.
No lo verán mis ojos, y pese a que lo entiendo
una envidia muy suave me anida en lo profundo.

Están naciendo ahora, en el mismo momento
en que mueren los dioses del odio y la tortura
,
mientras borra la tierra las huellas del tormento
en los rostros de aquellos que mató la locura.

De las tumbas ignotas se fugaron los sueños,
que resisten tozudos el odio y la metralla
y prenden (yo lo siento) como retoños nuevos
y darán algún día de nuevo la batalla.

Los que ordenaron muerte, los que creen que vencieron,
los jenízaros ciegos, los que creen que han vencido
morirán sin saberlo, porque nunca supieron;
no volverán los sueños, porque nunca se han ido.

lunes, 13 de mayo de 2013

Almafuerte (Pedro B. Palacios)


El 13 de mayo de 1854 nació Almafuerte. Recuerdo que me enteré de su existencia en mi adolescencia al ver ya no recuerdo si una placa o un busto en la plaza San Justo, en La Matanza (Bs. As.), lugar de su nacimiento y centro Municipal del partido que fué mi segundo lugar de residencia ( uno entre los muchos que tengo en el prontuario).
Supongo que todos conocen lo principal de su obra poética pero no viene mal reproducir algo al rememorar su nacimiento.
Algunos de sus versos a mi parecer son mediocres, otros que ni fu ni fa y algunos que para decirlo con términos castizos y académicos son unos versos de lareputamadre. De esos, algunos.


¡AVANTI!

Si te postran diez veces, te levantas
otras diez, otras cien, otras quinientas:
no han de ser tus caídas tan violentas
ni tampoco, por ley, han de ser tantas.
Con el hambre genial con que las plantas
asimilan el humus avarientas,
deglutiendo el rencor de las afrentas
se formaron los santos y las santas.
Obsesión casi asnal, para ser fuerte,
nada más necesita la criatura,
y en cualquier infeliz se me figura
que se mellan los garfios de la suerte...
¡Todos los incurables tienen cura
cinco segundos antes de su muerte!


¡PIU AVANTI!

No te des por vencido, ni aun vencido,
no te sientas esclavo, ni aun esclavo;
trémulo de pavor, piénsate bravo,
y arremete feroz, ya mal herido.
Ten el tesón del clavo enmohecido
que ya viejo y ruin, vuelve a ser clavo;
no la cobarde estupidez del pavo
que amaina su plumaje al primer ruido.
Procede como Dios que nunca llora;
o como Lucifer, que nunca reza;
o como el robledal, cuya grandeza
necesita del agua y no la implora...
Que muerda y vocifere vengadora,
ya rodando en el polvo, tu cabeza!


¡MOLTO PIU AVANTI!

Los que vierten sus lágrimas amantes
sobre las penas que no son sus penas;
los que olvidan el son de sus cadenas
para limar las de los otros antes;
Los que van por el mundo delirantes
repartiendo su amor a manos llenas,
caen, bajo el peso de sus obras buenas,
sucios, enfermos, trágicos,... ¡sobrantes!
¡Ah! ¡Nunca quieras remediar entuertos!
¡nunca sigas impulsos compasivos!
¡ten los garfios del Odio siempre activos
y los ojos del juez siempre despiertos!
¡Y al echarte en la caja de los muertos,
menosprecia los llantos de los vivos!


¡MOLTO PIU AVANTI ANCORA!

El mundo miserable es un estrado
donde todo es estólido y fingido,
donde cada anfitrión guarda escondido
su verdadero ser, tras el tocado:
No digas tu verdad ni al mas amado,
no demuestres temor ni al mas temido,
no creas que jamás te hayan querido
por mas besos de amor que te hayan dado.
Mira como la nieve se deslíe
sin que apostrofe al sol su labio yerto,
cómo ansia las nubes el desierto
sin que a ninguno su ansiedad confíe...
¡Trema como el infierno, pero ríe!
¡Vive la vida plena, pero muerto!



miércoles, 1 de mayo de 2013

La viga en el propio (XXVII)

De monos y monarcas

Los Argentinos hemos tenido siempre una extraña fascinación por las monarquías.
Una fascinación tal que se puede decir que no somos hoy una monarquía simplemente porque no conseguimos un monarca dispuesto.
Y no fué porque no lo buscamos.
A diferencia de los Yankis, de los que pueden decirse muchas cosas pero que nunca incurrieron en tamaña pelotudez ( o por lo menos yo no estoy al tanto, para ser humilde) hasta tal punto que han resultado el modelo republicano para los pueblos de medio mundo, a diferencia de los yankis, decía, los protoargentinos se alzaron contra el dominio español pero no contra el monarca de los españoles y de estas tierras, al que siguieron rindiendo pleitesía durante seis años.
Y durante esos años -porque el magno soberano estaba en cana- anduvieron nuestros protopróceres ofertando el trono del Virreinato por Europa, ante nobles Ingleses, Alemanes y otros, incluídos otros nobles galaicos como todos sabemos (o mejor dicho como muchos sabemos, porque no nos lo contaron en la primaria y tampoco en la secundaria, con lo que muchos deben ignorarlo).
Por supuesto alguno podrá decir que era un movimiento estratégico buscando reforzar nuestra posición. Y podría creerse sino fuera que San Martin tuvo poco menos que cagar a puteadas a los Congresistas de Tucumán para que declararan la Independencia de una buena vez -aunque él mismo era medio monárquico según algunos-, mientras que hasta alguno de nuestros protopróceres (y uno de los mas gordos) desvariaba imaginando hasta una posible monarquía Incaica.
Y podría creerse si no fuera que con ya muchos años de Independencia y República sectores amplísimos de nuestra sociedad anduvieron meándose cuando se apropincuaba alguna excelsa, esplendorosa y admirada figura monárquica, como sucedió cuando la gorda Infanta Isabel o el anodino Príncipe Felipe de Edimburgo.
Y no sólo los culopaspados oligárquicos sino también la llamada chusma, el pueblo llano, envuelto en la misma ola de boludez congénita.
La monarquía, no importa si absoluta -como la del Papa Francisco, argentino y peronista- o parlamentaria como la Holandesa, constituyen una rémora del pasado bárbaro de la humanidad, la manifestación del repudiable, excecrable concepto de que algunos seres humanos nacen mejores, primeros entre todos y a salvo de la elección, crítica y deposición por sus pares, el resto de los seres humanos.
Por eso cuando una culopaspado de nacionalidad Argentina es nombrada reina y Cristina la menciona como algo así como el sumum de la aspiración y realización nacional junto con el otro monarca absolutista como el Fran (y mejor no hablemos de lo que esa monarquía le ha hecho a la humanidad) el alma se me acongoja y me obliga a decir:
Cristina, yo te apoyo en todas las que creo buenas. Pero en esta estamos enfrentados

¡Vivan La Repúblicas! ¡Abajo las monarquías! ¡No a la adulación de la Barbarie!

Se ruega depositar las puteadas en el recipiente al efecto al salir.