sábado, 23 de abril de 2011

Pensándolo bien... (II)










El problema agrario




Existe un problema que a mi ver es central en la fenomenología social Argentina, que atraviesa y subyace los sucesos de los últimos 60 años de nuestra historia cuando menos y que en general es ignorado o menospreciado en su importancia e implicancias.
Este problema es la lenta transformación y absorción de las formas sociales y de las explotaciones agrarias tradicionales por la sociedad urbana moderna, o dicho de otra manera: el reemplazo de los modos de producción, las relaciones sociales y las formas culturales atrasadas precapitalistas del agro por las de la sociedad moderna capitalista urbana.
Este conjunto de fenómenos es de tal importancia y amplitud que podemos encontrar su huella en la proliferación de villas miseria en las ciudades grandes, en el actual faltante de personal golondrina en las cosechas, en la base de buena parte de la delincuencia urbana y rural (en lo que se entiende penalmente como delincuencia, ya que como afirmaba Prohudon y yo suscribo, la propiedad - la propiedad de medios de producción-es un robo, pero no está catalogada así en la sociedad actual).
Interviene asimismo en la decadencia y despoblamiento de villorios rurales, en el crecimiento del fenómeno de madres jefas de hogar en los estratos pobres de ese orígen y en los problemas de comprensión a nivel educativo, falta de adaptación al trabajo habitual, reglado y permanente, etc.
Por el lado productivo es el orígen del aumento fenomenal de la productividad del agro y la mejora en la selección de especies de granos, frutas, hortalizas, etc., así como de la expansión y progreso tecnológico de la industria de maquinaria agrícola.
Pero visto sociologicamente el problema radica en que la transformación que comento, que constituye un fenómeno de una masividad y profundidad enorme y que abarcó y abarcará la vida de varias generaciones, es librado completamente a la improvisación, a las "fuerzas del mercado", es decir a la irracionalidad, la imprevisión y la inhumanidad.
El problema es de una complejidad y extensión tal que resultaría difícil (y en mi caso imposible) analizarlo como un conjunto. En virtud de este convencimiento lo trataré atendiendo a una subdivisión en los siguientes aspectos:

(1) Los trabajadores golondrinas
(2) Las migraciones internas de habitantes del campo
(3) Los "Pueblos originarios"
(4) La orientación del tipo de capitalismo agrario conveniente
(5) La decadencia (gracias a Dios) del Paisano mitológico como arquetipo nacional

En cada caso intentaré una definición y cuando corresponda una cuantificación y propuesta de encausamiento y resolución, que será forzosamente de largo plazo, práctica ésta que resulta extraña a los partidos políticos -incluído el frente Kirschnerista- cuyas visiones estratégicas no suelen alcanzar ni tan siquiera el tiempo de un período de gobierno, de allí la imprecisión o la ausencia de programas que permiten que un Sola por ejemplo sea un día Duhaldista y otro Kirschnerista, y Federal, y casi Pro, y Das Nevista y todo sin entrar en contradicción ni dejar de ser un peronista tan peronista como el mas peronista de sus hoy amigos y mañana enemigos (y este es solo un ejemplo entre cientos).
Y esto no es en esencia una crítica del Kirschnerismo. Así como Lenin veía en el izquierdismo la enfermedad infantil del comunismo, yo considero que el Kirschnerismo es la enfermedad senil del peronismo (aún cuando ellos lo nieguen por supuesto como buenos peronistas)
Enfermedad que no significará la desaparición de ese movimiento de masas como tal sino su superación, la purga definitiva de personajes y concepciones que navegan desde el neoliberalismo Menemista al cuasi fascismo de Viviani, el cuasi troscomarxismo de Abelardo Ramos (Q.E.P.D.) o el terrorismo derechista de Patti y Rico (que son 2 "compañeros peronistas", vale recordarlo), la deriva cuasi mafiosa de Duhalde o la ensoñación mística de Rodríguez Saa.
Claro que el proceso de esta enfermedad terminal no será corto ni sencillo, pero tengo confianza en que así sucederá.
Y sobre todo espero que los Kirschneristas tengan las bolas ideológicas para llevarlo a cabo.
Así que en próximas entradas iremos desgranando los temas, uno a uno.

Y no me puteen. Yo soy un compañero camarada correligionario tan Peronista- Justicialista- Menemista- Duhaldista- Kirschnerista- Troskista- Ultraderechista como el que mas.

viernes, 22 de abril de 2011

Me salió un versito (XXIX)















Buenos Aires



¿Qué te puedo decir yo, Buenos Aires,
que no haya dicho Borges más hermoso?.
¿Qué puedo susurrar que De la Pua
no dijo con lunfardo primoroso?.

Si para peor no sé si yo te quiero,
aunque quizás te quiero demasiado
porque das vueltas siempre en mis recuerdos
y tu arrabal me duele en el costado.

Y ni siquiera sé si te recuerdo
o me traigo a mí mismo del pasado,
de entre tu antiguo smog y de tus luces,
de tu asfalto, tu barro y tu empedrado.

Quizá será por eso que te quiero,
o tal vez por lo mismo te rechazo;
porque guardan mis sueños tus callejas
y en tu ayer mi futuro perdió el paso.

Hoy ya no sos la misma; yo tampoco
y sigo estando lejos y a tu lado;
ya no sé si te quiero o si te quise,
ya no importa tampoco demasiado.