lunes, 28 de febrero de 2011

Te cuento un cuento (XIII)







Baltierrez el escéptico

¿Sabe usted lo que es un escéptico? Le aseguro que no. Probablemente haya visto o incurrido en actitudes escépticas.
O puede que haya pasado por períodos de escepticismo. Eso es estar escéptico, no ser escéptico.
Baltierrez era escéptico. Desde su mismo nacimiento. O mejor desde antes.
Baltierrez no estaba convencido de nada, no creía en nada, dudaba de la validez de todo.
Según comentaba su madre, su embarazo fué de diez meses y finalmente la sometieron a cesárea.
Todo estaba bien, nunca supieron porqué la criatura no daba señales de iniciar el trabajo para salir.
Yo sí lo sé. Baltierrez (en ese entonces ni era Baltierrez todavía) era escéptico acerca del nacimiento.
Sí; le llegaban señales químicas,genéticas, hormonales y físicas de que debía hacerlo.Pero; ¿qué seguridades había de que eso es lo que quisieran decir?. ¿Y qué garantías de éxito tenía el evento?
¿Y con qué ventaja cambiaría el estado conocido?
Así que se quedó hasta que lo sacaron de prepo, porque el escepticismo conduce inevitablemente a la inacción.
¿Quién va a ejecutar nada si nada le resulta convincente, irrefutable, cognoscible?.
El escéptico es en definitiva un vago filosófico, un vago por análisis racional.
Porque una cosa es ser indeciso o dubitativo y otra ser escéptico.
El primero tiene un problema de carácter. El segundo tiene una posición racional, tan valedera como cualquier otra, que le impide actuar.
Claro, el que no es escéptico dificilmente lo entienda, así que a Baltierrez niño le diagnosticaron primero atraso madurativo, luego retraso mental y finalmente lo definieron como retardado.
Porque el tipo no jugaba, no respondía a los estímulos, no aprendía, parecía un vegetal, bah, siempre con la mirada ausente, quieto en un rincón.
Pero lo que no sabían es que Baltierrez no estaba ausente; procesaba información en forma permanente, analizaba su entorno, cavilaba sobre el orígen la causa y el efecto de cada cosa.
Y si usted se pone a analizar cualquier cosa por pequeña que sea, de las que acepta normalmente como ciertas, inamovibles, indubitables, comprobará asombrado que la razón humana al desmenuzarlas encuentra siempre pros y contras, dudas mas que certezas, contradicciones mas que razones.
Lo que pasa es que los comunes mortales, digamos los normales, para llamarnos de alguna manera, no solemos analizar un pepino. Le metemos para adelante nomás, le ponemos a las cosas la etiqueta de ciertas y a otra cosa mariposa.
Por eso cuando nos pasa algo que derrumba todo lo hecho quedamos hechos pelota preguntándonos ¿pero como pudo suceder, si yo la tenía reclara?
Bueno; la cosa es que inevitablemente (aunque el no estaba convencido) Baltierrez creció y se hizo hombre.
No se casó, desde luego, ni practicó deportes, ni militó en ningún partido político, ni se hizo adepto de ninguna religión (pero tampoco era ateo, claro).
El solo razonaba, razonaba y todo era inseguro, imposible de conocer en su totalidad, contradictorio, imperfecto y en consecuencia impredecible, indominable.
¿Qué persona haría algo que no le fuera enteramente comprensible, seguro y en virtud de lo mismo, manejable? Cualquiera por supuesto.
Es lo que hacemos los seres humanos del principio al fin, a los tumbos y a oscuras.
Pero Baltierrez no. El era escéptico.
Yo lo sabía. Yo siempre lo supe, pero fuí el único y siempre dudé sobre la conveniencia de defender esa certeza.
Y así fueron pasando los años.Y el y yo nos fuimos poniendo viejos.
Ayer me enteré que falleció. Me dicen que estuvo en estado vegetativo durante meses. Suponen que tenía muerte cerebral aunque las tomografías mostraban actividad.
No me tomé el trabajo de aclararles el equívoco: ¡ma de que muerte cerebral me hablan! Estaba sencillamente sopesando el costo-beneficio de cambiar hacia condiciones de estado ignoradas.
Nunca sabré si finalmente tomó una decisión pero lo dudo. La naturaleza finalmente lo debe haber forzado.O Dios.
Aunque soy totalmente escéptico acerca de ambos factores.

sábado, 26 de febrero de 2011

Aclaremos dijo Lemos







¿ONCCA, estás ahí?



El periodismo nacional es de cuarta.El contrera y el a favor.Hay excepciones, como en toda generalización, pero en general yo lo veo así.
Y los ciudadanos de a pié debemos navegar buscando claridad entre la maraña de cuasi noticias para entender mas o menos que mongo está pasando.
Y en esta ocasión nos enteramos de golpe que la ONCCA fué disuelta y reemplazada por una especie de comisión colegiada que se hará cargo de los subsidios al agro y la "agroindustria". Por lo menos eso entendí yo tal como estaba redactada la noticia (y hablo de Telam). Y no solo yo, ya que por lo menos Javier (Fin del capitalismo ¿salvaje?) tenía dudas similares.
Como disgresión antes de seguir, como buen jubilado al que todo le parece mal: ¿Porque pito se denomina "agroindustria" a la que utiliza materia prima agrícola? Con el mismo argumento toda la metalurgia, la de materiales de construcción (cemento, pinturas, paneles, etc) y buena parte de la industria química debería denominarse "mineroindustria" porque utiliza minerales como materia prima.y sería creo yo tan boludo como llamar agroindustria a..la agroindustria.
Lo que se consigue con esto es asignar al agro una incidencia en el PIB (y un peso político en consecuencia) que no corresponde. La industria es industria.Punto y aparte.
Bueno. La ONCCA es -o mejor dicho, era- un organismo creado en el Menemato si no le erro, pero que había sido recuperado por el Kirschnerismo para ordenar el sector semifeudal de nuestra economía (o sea "el campo").
Y suscintamente tenía dos vertientes de actividad: Blanquear la operatoria por un lado y asignar subsidios (a Feedlots, fábricas de harina, etc) por el otro.
El blanqueo se fundamentaba esencialmente en el registro obligatorio de productores, acopiadores y exportadores, la emisión de cartas de porte (antiguo feudo del Marqués Buzzi) y la asignación de los llamados ROE (verde y rojo) para aprobar lotes de exportación de granos y carne.
Los subsidios a Feedlots buscaban compensar el creciente abandono de la cría ganadera (originado en la ganancia extraordinaria del cultivo de soja fundamentalmente) con la producción de carne vacuna "a corral", mientras los subsidios a la molinería buscaban despegar el precio interno de las harinas del valor de exportación para defender el costo de la canasta alimentaria.
Bueno. Hete aquí que leí al Barón LLambías y al Conde Biolcatti hablar bien de la eliminación de la ONCCA y eso me aterrorizó.Si semejantes nenes están conformes (o mas o menos) algo está muy mal, me dije.
Bueno.En primer lugar, la ONCCA fué eliminada por decreto 192/ 2011, pero sus equipos humanos y materiales y sus funciones se traspasan al Ministerio de Agricultura Ganadería y Pesca según reza el Art. 5º "Transfiérense de la ex OFICINA NACIONAL DE CONTROL COMERCIAL AGROPECUARIO al MINISTERIO DE AGRICULTURA, GANADERIA Y PESCA las unidades organizativas con sus competencias, créditos presupuestarios, bienes, dotaciones y personal vigentes a la fecha, con sus respectivos niveles, grados de revista y Funciones Ejecutivas".
Sus atribuciones en lo referido al control de la actividad de los Señores feudales autodenominados "el campo" continúa, si bien se agrega siempre el aclaratorio "en el ámbito de su competencia” lo que en esencia no varía (o no debiera variar) nada, pues la fijación de las políticas, aranceles y mecanismos nunca fué su atribución fungiendo solo como aplicador de tales mecanismos.
Queda por ver que enjundia pondrá el Ministro de Agricultura en la eficiencia operatoria.A mi particularmente el actual Ministro no me piace, pero como solo es el aplicador de los lineamientos del ejecutivo espero que no sabotee lo logrado hasta aqui en aras de su simpatía con los Barones del campo, o que se lo raje si lo intenta.
Así que primera cosa: Los muertos que vos matais gozan de buena salud, Barón Biolcatti.
En descargo del Barón Biolcatti debo aclarar que anoche por Canal Rural lo ví decir cosas opuestas a lo que figura en la noticia que comenté antes, lo cual me hace volver sobre el periodismo que tenemos (o sobre los "Barones" que tenemos, no sé quién dijo algo diferente en definitiva)
Segunda cosa: Por otro decreto, el 193/ 2011, se crea la "Unidad de Coordinación y Evaluación de Subsidios al Consumo Interno". Esta comisión no reemplaza a la ONCCA sino que solamente asume la parte de asignación de subsidios que la ONCCA aplicaba y deberá también (aquí está la parte con la que no acuerdo hasta que no se me demuestre mi error) "Llevar un Registro de Operaciones de Exportación".La ONCCA hacía esto apropiadamente.No veo la ventaja de recrear lo ya existente en otra área.Pero en definitiva no constituye un punto central.
Lo central es la asignación de subsidios y aquí sí veo correcto aunque no sé si practico separarlos de la ONCCA. En la práctica recuerdese que Moreno actuó como asignador de subsidios cuando la sequía, distribuyendo maíz a ganaderos del sur de Bs As, Santa Fe y creo que también sur de Córdoba, y que los subsidios a la molinería son SUBSIDIOS A UNA INDUSTRIA, no al agro. Pero resulta que su aplicación dependerá de información que brindará forzosamente quien emita las cartas de porte, o sea la NeoONCCA del Ministerio de Agricultura.Como ahora se pueden entrecruzar datos electronicamente, tampoco sería gran impedimento.
Resumiendo: Ni tanto ni tan poco.Sigo sin entender para que lo hicieron, pero
el sistema sigue intacto y eso es lo que en definitiva importa.

¿Les resultó útil? Me alegro. ¿No se entiende nada? Consulten a alguno que sepa

sábado, 12 de febrero de 2011

Me salió un versito (XXVII)



Introito





Hoy volví a Ibarlucea, un pueblito cercano a Rosario donde vivimos hace casi veinte años.
Era un lugar agrario pero ya en vías de perder ese estado tragado por la gran ciudad. Y en aquel entonces le escribí estos versos con cosas que hoy ví hechas realidad.
Y como no quiero hablar de otras cosas (dejemos pasar las peronadas, por favor, que agotan) pero me impactó el maldito progreso que cambia todo y nos borra los recuerdos, aquí va el verso.

Ibarlucea

Por las noches las luces de la ciudad lejana
quieren robarte el cielo virginal de la pampa,
mientras la carretera mancillando lo agrario
con su procaz asfalto te encierra entre sus brazos.

Sin embargo resiste tu placidez aldeana
recostada en trigales que arrullan tu mañana.
Hay un ballet de espigas que danza por tu falda
mientras te teje un velo de brumas la alborada.

Todavía los pájaros te habitan simplemente
y no tienes las manchas del mundo del presente.
Todavía la siesta al sudor pone pausa
y se cruzan a veces los cuises por tu plaza.

No será así mañana, ya te pisa el futuro,
ya te pinta el mañana con sus luces de oscuro
Pero mientras te cambias para entrar al progreso
una vez mas te miro y una vez mas te beso.

Quiero guardar por siempre apretado a mi pecho
tu corazón de verde, tus pastizales frescos,
la sombra de tus sauces, el oro de tu otoño
y el canto cosechero que te acuna el entorno.

Quisiera que no cambies mientras estas cambiando,
que para siempre seas lo que ya no estás siendo.
Mientras te vas, te quedas, estás aunque te pierdo
por siempre Ybarlucea guardada en mi recuerdo.

domingo, 6 de febrero de 2011

Quiero tener un millón de amigos....



Igual que en la vidriera
irrespetuosa
de los cambalaches
se ha mezclao la vida
y herida por un sable
sin remaches
ves llorar la Biblia
junto a un calefón

Seguimos tragando sapos
Todo sea para que Cristina siga al frente
Pero, cumpas Justicialistas, no ovidar:
Con amigos como estos ¿Quien necesita enemigos?

viernes, 4 de febrero de 2011

Te cuento un cuento (XII)








LA MALA PATA



La mala pata existe.
A mi no me vengan con que todo depende de nuestra actitud, que son los hombres los que forjan su destino y no el destino quien forja a los hombres y toda esa varsata pseudofilósofica.
No niego que a la suerte hay que ayudarla, como también suele afirmarse, pero estoy convencido que como dice el tango, contra el destino no hay quien la talle. Y si no, ahi está Alcibíades López para comprobarlo.
Alcibiades luchó desde su temprana juventud para forjarse una posición en la vida. Nadie puede negar que lo intentó.
Y eso que arrancó mancado, como diría un burrero.¿Quién puede triunfar apellidándose López y llamándose Alcibiades?
Tanto prestaba atención Alcibiades a los signos y las conductas asociadas con el triunfo y el ascenso social, que lo primero que hizo fue comenzar a presentarse como López Canedo, echando mano al apellido materno para borrar el estigma de almacenero.
El doble apellido, que es normal en los españoles y que ha sobrevivido en varias naciones sudamericanas como legado histórico, es en la Argentina propiedad exclusiva de las familias patricias, pero como adicionar el apellido materno es legalmente superfluo pero no es ilegal, recurren a esto con bastante asiduidad ciudadanos castigados con apellidos gallegos que cuentan con mas ínfulas que prosapia. Y eso hizo Alcibiades.
Con el nombre fue mas difícil pero también le encontró la vuelta, y unos años después todos lo conocían como Al, con lo que dotó al nombre con una vaga reminicencia anglosajona, que también viene bien.
A su tiempo Al compró el libro de Dale Carnegie "Como ganar amigos y triunfar en los negocios", que estaba de moda en aquel entonces entre los aspirantes a triunfadores del mañana.
Claro que justo le tocó un ejemplar mal encuadernado, asi que faltaba el cuadernillo del final de cada capitulo, como si estuviera leyendo "Como ganar... y triunfar en. ..." .Porque el pobre Al no pegaba una.
Comenzó a vender máquinas calculadoras mecánicas, de aquellas que efectuaban cálculos girando una manivela como poseídos, porque entrevió el potencial de crecimiento del comercio y concretó una enorme importación de las mismas justo antes que Fate sacara las calculadoras eléctricas Cifra, nacionales.
Insistió con la representación de hojitas de afeitar justo cuando Gilette largó las maquinitas descartables.
Pero no se amilanaba, no crean. Trajo un cargamento de banderitas inglesas y norteamericanas justo antes de la guerra de Malvinas, que como eran chicas nadie las quería ni para quemarlas.
Y no me digan que los fracasos dependían de él, que no investigaba el mercado, que no se mantenía actualizado. No, no era así, se gastaba buena parte de las ganancias de las pocas que le salían bien en viajes, cursos de marqueting y seminarios de negocios.
Al final era lógico que aflojara un poco. Bah, mas que un poco. Estaba hecho pelota, tenia la autoestima por el suelo, como se dice ahora.
Y por si esto fuera poco, a la vejez viruela, como se decia antes. Al se enamoró por primera vez en su vida.
"No podría soportar uh fracaso en esto" me confió, o mejor dicho nos confió a los habitúes de la confitería donde había planeado las audaces estrategias de sus innúmeros fracasos.
Esto fue hace unos meses. Pero Al no es tipo de dejar las cosas libradas a la suerte. No, el pone empuje, ayuda a la suerte, se prepara para la victoria, no como el tipo del cuento que escuché el otro dia, que rogaba a Dios que le hiciera ganar la lotería hasta que Dios, cansado de las suplicas, bajó y le dijo "De acuerdo, de acuerdo, te haré ganar ¡pero por lo menos comprá un billete, che!"; asi que hizo un curso de asertividad, asistió a clases grupales para la revaloración de la autoestima, practicó Tai-chi- chuán, se anotó en dos seminarios de control mental y finalmente recurrió a los servicios de un asesor de imagen.
Comenzó después una calculada estrategia de acercamiento y seducción y cuando creyó que las brevas estaban maduras, como diría San Martin, decidió el ataque.
Eso fue ayer. Esta mañana llegó a la confitería, saludó y se puso a leer el diario mientras todos conteníamos la respiración esperando su relato, primero porque somos la barra y segundo porque en cuestiones de conquistas los hombres somos mas chusmas que nadie.
Hasta que uno no aguantó mas y lo apuró ansiosamente."¿ Y entonces, Al? ¿Cayó la fortaleza?".
Al dejó el diario, nos recorrió a todos con la mirada y finalmente, casi como un suspiro, declaró: "Resultó lesbiana, che. Me sacó carpiendo".
Y que me vengan después conque no existe la mala pata.