viernes, 4 de diciembre de 2009

El Mediopelo (I)

INTRODUCCIÓN
Creo que hay un elemento que resulta central entender en la estructura social argentina :
El medio pelo, o clase media, o sectores medios (enumero algunos, no sé si todos, los sinónimos que la nombran).
Existe- entiendo yo- una opinión generalizada entre los sectores progresistas, en su sentido mas amplio, que desvaloriza y rechaza las costumbres, los modos y la ideología preponderantes en ese grupo social (y me incluyo en este concepto o preconcepto).
¿Porque considero entonces tan importante estudiar al medio pelo? Pues sencillamente porque ese sector representa hoy un porcentaje fundamental o por lo menos muy importante de la población y porque sus valores y su ideología dominantes se han generalizado y extendido a casi todas las franjas sociales.
La importancia que este sector tiene ha quedado suficientemente expuesta por su actuación en el debate social por las retenciones.
Y no importa tanto explicar como lo cooptaron los empresarios agrícolas, sino en función de que características intrínsecas fué cooptado.
En función de su peso porcentual es entonces que su captación resulta fundamental para lograr la evolución del conjunto de la sociedad, en democracia, hacia formas mas solidarias, equitativas y progresistas.
Para poder influenciarlo se hace imprescindible en primer término conocerlo; definir este sujeto social, su composición, su presencia porcentual en el conjunto de la población, su historia, su estructura ideológica y sus intereses. Pavada de objetivo, que excede muy probablemente mi capacidad y que quizás ya ha sido abordado por otros mas idóneos, ignorándolo yo (me refiero a algún abordaje contemporáneo, pues desde Marx a Jauretche podemos abrevar en disquisiciones anteriores sobre el tema, que por supuesto deben tomarse como ricos antecedentes).
Así que no pretendo dictar una cátedra,ni imponer un dogma (aunque vaya que me gustaría), sino contribuir a la discusión, de la que dicen que nace la luz (después de las oposiciones, observaciones, puteadas y enojos que caracterizan este tipo de propuestas).
El tema dará para mas de una entrada; pretendo ir exponiendo aspectos puntuales en forma independiente, de allí que éste se denomina "Mediopelos I"
Desde ya gracias o que terrecontra, según el caso.

a) ¿Quienes son? ¿Qué son?
En primer lugar debemos afirmar que la clase media NO ES UNA CLASE. Por supuesto sabemos que la derecha niega la existencia de las clases y la lucha de clases, lo cual es muy similar a la negación del Holocausto por Amedinayad (o como pitos se escriba).
Así que ya partimos de invitar a retirarse de este foro a los Amedinayad occidentales.
Partiendo entonces de la aceptación de que las clases existen, lo que las define es la uniformidad de su actividad en relación al proceso de la producción social, a la división del trabajo.
Es decir, los proletarios industriales u obreros propiamente dichos, por ejemplo, se supone que son tan diferentes entre sí como cualquier otro ser humano, pero su ubicación idéntica dentro de la trama social les generaría, por encima de esas diferencias, un conjunto de ideas, relaciones y reacciones que responden a la necesidad de defender su conveniencia personal y que son comunes a todos los que ocupen ese lugar en la sociedad. Esto es diferente a la conciencia de clase. Puede que cada "proletario" (que hermosa y perimida adjetivación) no se considere de esa clase, o no sea conciente de ello, pero la situación objetiva se supone que lo lleva a ejercer determinadas acciones o aceptar determinadas concepciones que corresponderán al conjunto de esa clase, que sucederán por fuera y por encima de su visión como sujeto o indivíduo.
Esto era explicado así por el marxismo ¡Que hermosa época aquella en que todo parecía explicable, vaticinable, inexorable!
Esa concepción (que fué la mía) ha recibido tantos sopapos de la historia que hoy debemos utilizarla con las debidas salvedades- que son casi todas- producto del desarrollo de las fuerzas productivas (esas que ya no deberían estar vigentes bajo la forma capitalista, se suponía) y de los medios de comunicación y de la aplicación por los grupos de poder de las disciplinas psicológicas y sociológicas al dominio de las sociedades (las operaciones de guerra psicológica, que le dicen).
Ahora bién: ¿Puede aplicarse el principio de análisis mencionado a la caracterización de la clase media (en adelante el mediopelo)? Indudablemente no.
El mediopelo se compone de un espectro amplísimo de ocupaciones, niveles, profesiones y ubicaciones en el tejido social.
Yo casi no conozco argentinos (exceptuando a los muy pobres) que no se consideren "de clase media". Desde taxistas, camioneros, empleados (su sujeto arquetípico), técnicos, profesionales, industriales pequeños y medianos (no tengo trato con grandes industriales, tipo Pescarmona, por ej:, pero no me extrañaría que también se consideren clase media), obreros calificados (preponderantemente de ascendencia europea), comerciantes, viajantes, repositores, periodistas, "opinólogos"; en fin, la lista es casi interminable.
El mediopelo suele acreditarse la educación como uno de sus mas preciados atributos. La mitad de ellos (a ojo de buen cubero) no cumplen el requisito. Otro porcentaje- muy grande- fueron educados, sí, pero resultaron inmunes (practicantes de la "cultura del sobaco", en la genial acepción de Jauretche).
Pero entonces ¿Que miércoles define al mediopelo? En mi opinión, lo que los define es que ejercen funciones con escasa o nula utilización de esfuerzo físico. Es practicamente el único atributo generalizable a través de todo el sujeto social en estudio.(Por supuesto se encontrarán excepciones y desvíos a esta caracterización.Marx decía " No existe el pez en general, solo existe cada pez", lo que indica que toda generalización tendrá inevitablemente errores y salvedades, no porque lo dijo Marx, sino porque es así.Pero el ser humano solo puede interpretar la multifacética realidad a través de categorizaciones y generalizaciones, lo lamento).
Como veremos en próximas entradas, su existencia y -sobre todo- su importancia resultan una consecuencia natural de la división del trabajo y el desarrollo de las fuerzas productivas; ellos, sin embargo, lo atribuyen a sus altas virtudes personales, explicando así su evasión de la maldición bíblica "ganarás el pan con el sudor de tu frente" y estableciendo así no sólo su justificación sino también su superioridad sobre otros sectores.
Ya veremos mas adelante que esa elaboración resulta tan natural y primitiva como el plumaje colorido de las aves macho, pero por ahora, como diría el inefable Bernardo Neustadt, su adalid, su Ayatolah: "Lo dejamos ahí"

Otro sí digo: Esta serie continuará, pero no se sabe cuando.Entre una y otra seguiremos con otro tipo de verso: los versos, que me resultan tan placenteros como explicar la compleja, cambiante e hipnóticamente atractiva vida social, y que al fin y al cabo abordan el mismo tema con palabras mas hermosas y pensamientos mas floridos que la sociología.

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